Tener hijos hoy en día es de
valientes y casi de héroes , si son más de la media.
Esta crisis nos ha sorprendido a
todos, incluso a los que teníamos nuestra vida más o menos planificada y habíamos
apostado por tener más hijos aún a costa de vivir más o menos ajustados.
Ahora nos encontramos con que los
salarios están congelados, los precios han subido, los transportes, el IVA,...
pero nuestro número de miembros en el hogar no ha bajado.
El consumo es uno de los pilares
sobre el que se sustenta nuestro sistema de bienestar social y nuestro sistema
económico. Si no hay consumo no hay recuperación. Y sobre nuestras familias está
recayendo gran parte del peso de la crisis, porque supone ajustar nuestra
economía día a día y sobre todo porque consumimos (bien lo saben las
grandes empresas) y pagamos nuestro correspondiente IVA. Por lo tanto, en
comparación pagamos mucho más IVA que otras personas que no tienen tantos
miembros en el hogar: activamos la economía.
Sin olvidar los ajustes económicos,
los que actualmente trabajamos, estamos pagando las pensiones de nuestros
padres. Nuestros hijos serán los que paguen nuestras futuras pensiones y mantengan
el sistema de Bienestar Social de España, o por lo menos aquellos que
permanezcan en España y no emigren a Alemania u a otros países con economías
emergentes. Pero claro, con una tasa de
natalidad baja, no se puede pensar que nosotros tendremos las mismas pensiones que
nuestros padres. Y todo por falta de previsión política y priorización en el
apoyo a las políticas familiares .Muchos de nuestros políticos nos invitan a
hacer previsión de fondos para nuestra jubilación, con lo que están
reconociendo su ineficacia a la hora de establecer medidas justas y equitativas ,con el agravante que, con la crisis, las familias numerosas no tenemos
capacidad de ahorro y la posibilidad de tener un plan alternativo es
casi imposible. El resultado es obvio, tendremos pensiones más bajas.
Las familias numerosas estamos
realizando un esfuerzo, y es de justicia que se nos reconozca por solidaridad y
por equidad. Es una buena oportunidad para hacer una política con
perspectiva de familia que favorezca el reemplazo generacional, el crecimiento económico
y la estabilidad social y demográfica que necesitamos.
Señores políticos: sean responsables
en sus políticas sociales y económicas a corto, medio y largo plazo. Hay algunas cuestiones de política
social que ustedes no han hecho del todo bien, independientemente del color de
su partido.
Si no podemos ahorrar porque
consumimos y el consumo es el motor de la economía, lo justo es que se nos
reconozca en el futuro, de alguna forma, porque quienes invertimos en futuro
somos las Familias Numerosas.